Proteína whey casera
Cómo preparar proteína whey casera
La proteína de suero es un subproducto de la producción de queso. El suero es el líquido que queda tras la formación del queso. El suero ya es útil, pero deshidratarlo lo hace aún más. Después de deshidratarla, le quedará la proteína de suero. Puedes utilizarla en batidos, smoothies, magdalenas y muffins una vez que haya sido molida.
Para realizar un proteína de suero desde cero necesitarás 4 litros de leche y 5 cucharadas de zumo de limón o, vinagre blanco.
1
Llene una olla grande hasta la mitad con leche. Se necesitan 4 litros (1 galón) de leche. Utilice leche entera de vacas alimentadas con pasto para obtener los mejores resultados.
También se pueden utilizar 4 tazas (950 mililitros) de leche y 2 tazas (475 mililitros) de nata.
2
Calienta la leche a 83 grados Celsius (180 grados Fahrenheit). Se puede utilizar un termómetro de cocina para comprobar la temperatura introduciéndolo en la olla y dejándolo a un lado. Si no tiene un termómetro, espere a que la leche empiece a hervir a fuego lento. La temperatura a la que la leche hierve a fuego lento es de 83 grados Celsius (180 grados Fahrenheit).
No permitas que el termómetro entre en contacto con el fondo de la olla.
3
Mezcla 5 cucharaditas (75 mililitros) Si no tiene zumo de limón a mano, sustitúyalo por vinagre blanco; el sabor será casi comparable. De esta manera también se producirá el requesón. Si deseas comer el queso, el vinagre blanco puede ser la mejor opción de las dos.
Añade 12 cucharaditas (8,5 gramos) de sal y 3 cucharadas (45 mililitros) de zumo de limón o vinagre blanco si utilizas leche y nata.
4
Dejar enfriar durante 20 minutos después de retirar la solución del fuego. Tapar el cazo con una tapa hermética. Retíralo del fuego y guárdalo en un lugar seguro. Déjalo reposar durante 20 minutos.
5
Colocar la cuajada y el suero en una fuente con un colador encima. Encima de la fuente, coloque un colador grande. Con un trozo de estameña, cubra el colador. Con una cuchara o un cazo, vierta la cuajada en el colador. Colocar el resto del líquido en una jarra o tarro de cristal grande y refrigerar.
6
Deje que el suero escurra completamente de la cuajada. Para este paso, es mejor que pongas el bol en la nevera. No querrás que la leche se estropee porque el suero tarda al menos 2 horas en escurrir.
7
En caso de que tengas un deshidratador utilízalo para procesar el suero. Vierte el suero (tanto de la jarra como del bol) en las bandejas del deshidratador: cada bandeja necesitará aproximadamente 1 taza (240 mililitros). Sigue las instrucciones del deshidratador para procesar el suero. Cada marca será diferente, pero la mayoría de los deshidratadores tardan 12 horas a 58 grados Celsius (135 grados Fahrenheit).
8
Si no tienes un deshidratador, puedes procesar el suero a mano. Llene una olla con suero hasta la mitad. Llévelo a ebullición a fuego medio o alto, y luego redúzcalo a fuego lento para mantener un hervor constante. Deje que se cocine hasta que se haya espesado y se vuelva grumoso. Deja que se enfríe en una bandeja forrada con papel pergamino o papel encerado. Deja que se cure durante unas 24 horas después de dividirlo en trocitos.
9
Licua el suero deshidratado hasta que se forme un polvo. Esto puede hacerse en una licuadora o en un procesador de alimentos. Si tiene uno, puede incluso utilizar un molinillo de café limpio. Si el suero procesado a mano sigue estando húmedo después de esto, extiéndalo de nuevo y déjelo secar durante otras 24 horas antes de licuarlo.
10
Guarde la proteína en polvo en un recipiente con tapa. Para ello, lo ideal sería un tarro. La proteína en polvo se puede utilizar en batidos de proteínas, magdalenas y panes, entre otras cosas.
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